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martes, 26 de abril de 2011

Concejos Asturianos VII



BOAL

Partido y medio cortado. 1º, de gules, armas de Castropol. 2º, de azur, armas de Oviedo. 3º, de plata, buey de su color, sobre terraza de sinople. Al timbre, corona real cerrada.


Reseña Histórica.

De la época del paleolítico no se han encontrado restos. Los primeros datos que tenemos son del neolítico, como así lo demuestran los túmulos que se encuentran en la sierra de Penouta. También hay restos de túmulos en la sierra de Penacaros, en esta sierra se encontró el famoso puñal de antenas, realizado en bronce y de una sola pieza.

De la época castreña, hay cinco castros importantes: el de Pendia, el de La Escrita, el de los Mazos, el de Castrillón y Ecastelo, indicándonos su emplazamiento un marcado carácter defensivo. Su datación gira en torno al siglo I y II después de Cristo.

En la Edad Media, empiezan a aparecer las primeras fuentes escritas, procedentes casi todas ellas de fondos documentales eclesiásticos. Son dos los principales centros de esta época: la iglesia de Oviedo y el monasterio benedictino de San Juan de Corias, llegando el primero a tener su predominio sobre todas las tierras comprendidas entre el Eo y el Navia, por un acuerdo promovido por el rey Alfonso VII, para poner de este modo fin a las disputas entre los prelados de Oviedo y Lugo.

Esta zona se constituyó como municipio independiente, aprovechado la desamortización de Felipe II, siendo Boal su capital, pasando un tiempo al núcleo de Armal, que disfrutó de esta condición, y volviendo a pasar a Boal definitivamente en 1.791.

Durante el siglo XVIII, su actividad es agraria y ganadera principalmente.

En el siglo XIX, la guerra de la independencia se dejó sentir en Boal, siendo la villa invadida por los soldados franceses donde se creía que existía una fabrica de armas. Durante la guerra carlista también fue invadido el concejo, y conoció otros problemas, como el cólera o la epidemia de viruela.

El siglo XX, trae una serie de avances, como la construcción de carreteras: Navia-Grandas de Salime y Navia-Boal, la construcción del pantano de Doiras, o las explotaciones de las minas de wolframio de Penouta que llevaron a este concejo a su cuota de máxima desarrollo en 1.951, hasta su cierre en 1.963.